
Hellboy II, es la segunda entrega de este “antihéroe” que desde el primer momento en que apareció en pantalla, dejo claro que sus métodos para el orden y la justicia, no son lo que muchos esperan.
Si bien la primera cinta marco definitivamente a Guillermo del toro como un gran realizador de películas de acción, también le abrió las puertas del mundo cinematográfico con bombo y platillos por su alta recaudación en taquilla. Al verse este episodio uno puede apreciar una oscuridad y cierto encantamiento que ha sido el sello personal del director estadounidense Tim Burton, así como lo que seria su obra maestra El Laberinto Del Fauno, que lo llevo a recorrer caminos que ni el mismo imaginaba.
La cinta es divertida, tiene el triple de acción que en la primera, y empieza a vislumbrar el gran acontecimiento a donde esta saga tendrá que terminar, sin olvidar que en la primera película el tono era oscuro y fascista mientras que esta parte se separa de su predecesora por tomar un tono ambiguo entre fantasía y épico.
Se puede apreciar desde el principio y durante el planeamiento de la historia, que las huellas del laberinto del fauno, son latentes en los trabajos del director y que sin duda serán su “rubrica” cinematográfica como el de muchos cineastas.
Brillante, delirante, asombrosa y consistente, son algunas de las palabras que describen bien a este film, lo cual se agradece, y más por mantener vivo el interés en el héroe rojo y sus pleitos amorosos. La música, el vestuario y el diseño del arte, completan este viaje fantástico a las entrañas de un mundo, que desde hace tiempo grita por un poco de justicia.
Sin duda alguna Guillermo del toro, esta destinado a dejar una huella profunda y mística en todos aquellos que amen el cine y el contar de una historia.


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